Un vehemente llamado a recordar con respeto, devoción y gratitud a los héroes de la Restauración de la República, hizo este viernes el síndico José Enrique Sued Sem con motivo de cumplirse el domingo venidero el 146 aniversario de esa gesta heroica, que cambió para siempre el curso de la historia dominicana.
El Concejo Municipal de Santiago, como ya es tradición, está convocando para el 16 de agosto a una sesión solemne, a partir de las 10 de la mañana en sus salones principales, donde el Síndico presentará sus memorias correspondientes a este año y se escogerán a las nuevas autoridades de dicho Concejo.
Sued recordó a los dominicanos y dominicanas, especialmente a los munícipes santiagueros, que como se trata de una fecha patria es un deber colocar la Bandera Nacional frente a sus hogares, negocios y otros establecimientos el domingo próximo.
“De esta manera estaremos rindiéndoles un merecido y justo homenaje a aquellos patriotas que prefirieron sacrificar sus vidas y su bienestar por la libertad y la independencia plena del pueblo dominicano”, sostuvo el ejecutivo municipal a propósito de la emblemática fecha.
Destacó el síndico que como dominicanos agradecidos que debemos ser siempre hay que rendir honor a hombres de la talla de Gaspar Polanco, Gregorio Luperón, Santiago Rodríguez, Benito Monción, José Cabrera, y Pedro Antonio Pimentel, quienes son los principales protagonistas del 16 de agosto de 1863.
“Si hoy tenemos verdaderamente patria, se debe a la valentía y el arrojo que demostraron estos compatriotas que se batieron con honor y gallardía en los campos de la Línea Noroeste contra los ocupantes extranjeros que pisoteaban nuestra dignidad como nación”, destacó quien ha sido tres veces síndico de este municipio.
Sued hizo énfasis en lo que somos en estos momentos, es producto de lo que fuimos en el pasado, por lo que es necesario destacar el trabajo patriótico de Duarte y los Trinitarios, que nos legaron la Independencia Nacional pero que, al ser traicionados por malos dominicanos que no creían en los sentimientos de la Patria, usaron ésta como pedestal para entregársela “en bandeja de plata” al imperio español en 1861.
Sin embargo a pesar de su avasallamiento en recursos, soldados y poder, agregó, España nunca pudo apagar la tea del fuego libertario de los dominicanos, y los nombres de Matías Ramón Mella, Gregorio Luperón, José Contreras y otros muchos, iluminaron el porvenir de nuestra nacionalidad al conducir a decenas de patriotas que se inmolaron en expediciones y levantamientos armados contra la afrenta a la Patria que significó la anexión llevada a cabo por Pedro Santana.
El 16 de Agosto, un día como el domingo, pero del año 1863, se iniciaron en Capotillo provincia de Dajabón, las primeras escaramuzas de la Guerra de la Restauración y 14 días después habían caído en manos de los patriotas los pueblos de Guayubin, Dajabón, Montecristi, Sabaneta (hoy Santiago Rodríguez), Puerto Plata, La Vega, San Francisco de Macorís, Cotuí y Moca.
La Restauración fue una guerra de liberación nacional y una guerra social donde participaron hombres animados de poderosos sentimientos patrióticos y hombres de acción que abonaron con su sangre los campos de batalla, sacando al filo del machete y fuego, al soldado español que mancillaba nuestra soberanía.
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